La miel como conservante


Aunque desde antaño se ha utilizado ya la miel y sus derivados como conservante natural es ahora cuando empiezan a proliferar ciertos estudios en los que se demuestran y cuantifican las propiedades de la miel en la conservación de alimentos.

Tanto por su efecto de lisis osmótica, producida por su alta concentración en azúcares, que le aporta un efecto bactericida como por su efecto antioxidante se ha demostrado que en alimentos (en concreto carnes en el último estudio) provoca un retraso y disminución de elementos patógenos.